Como ya habrán notado, estoy como loca con la menta. Solo el mes pasado hice Grasshopper Pie, Grasshopper Cheesecake y un montón de experimentos locos con los que me terminé un tarrito entero de esencia en como dos semanas. Ni hablar de que tuve que comprar más, y como en el cotillón cerca de casa estaba re barata compré DOS frascos en lugar de uno.
A ver Antie, vos que sos tan loca… ¿Por qué «helado Grasshopper» y no «helado de menta granizada»? Vos no eras así de cipaya…
Pues te cuento: La menta granizada es eso: menta con cachitos de chocolate. Y si bien los postres «saltamontes» llevan menta y chocolate, lo común es que tengan también una base de tarta hecha de galletitas de chocolate. Y todo bien con ambos ingredientes pero se logran sabores bien diferentes si se usa uno u otro.
La última aclaración es una confesión. Esta es otra de esas recetas armadas entorno a un ingrediente «extraño» que tenía o quería usar. En este caso fue un paquete de galletitas Lincoln de chocolate, regalo de la bisCabuela al heredero. Y no sé que tendrán estos tipos, pero entre que el hederero parece no apreciar mucho las galletitas y el marido nunca está, termino teniendo que comerme los regalos yo (sino se terminan venciendo). Mi obvia solución: inventarme algún postre loco.
Helado de menta con galletitas de chocolate
- 500 ml de crema de leche o Fleiscream
- 100 g de azúcar (o a gusto)
- 1 1/2 cucharaditas de esencia de menta (7.5 ml)
- colorante (opcional)
- 150 g de galletitas de chocolate
Batir la crema con el azúcar hasta formar picos firmes. Agregar la esencia y si se quiere el colorante.
Procesar las galletitas al punto deseado (yo las pulvericé totalmente) y mezclar con la crema de menta.
Mandar todo al freezer en un tupper con tapa.
El veredicto
El resultado de esta preparación es un genial maridaje entre sus ingredientes. La menta se nota bien sin ser demasiado fuerte y las galletitas no se quedan atrás aportando sabor y textura.
La primera vez que probé este helado me puse a comparar los dos sabores principales y me satisfizo mucho ¡todo estaba en su medida justa!
Si se usa Fleiscream el resultado es un helado muy «poco frío», ya que tiene mucho overrun y cero líquidos. Me gustaría repetir esta receta con crema de leche ya que tengo la sospecha de que debe quedar más sabrosa aun. No sé si seré yo, pero después de mucha Fleiscream no sé si le habrán modificado algo pero la sensación que deja en la boca tiene algo que no me termina de convencer.
Lo único que no me termina de cerrar de esta preparación es el color, y es que las galletitas pulverizadas hacen que quede todo medio grisáceo. Igual no me quejo. Esta receta es suficientemente rica como para bancarse un aspecto menos que perfecto. La recomiendo mucho, realmente queda muy bien.