Esta última semana no fue de las mejores. Paso a relatar:
El miércoles por la noche llama mi suegro contando que su papá estaba internado. No estaban siquiera seguros de lo que tenía, pero la cosa estuvo medio hemorrágica y necesitaban 2 dadores de sangre. No sé si habrá sido por la experiencia de cuando operaron a mi Pá (que necesitó un montón) pero en seguida levanté la mano y me ofrecí.
Así que cancelando cualquier plan tuve que ir el jueves al sanatorio a poner el brazo. A diferencia de la vez anterior, que no tenía ninguna experiencia, esta vuelta quise chusmear como era el procedimiento. No quise ver el exacto momento del pinchazo, pero cuando fui a mirar grande fue mi desilusión al notar que me habían «censurado» todo con un montón de algodón.
Aun así saqué una fotito para la posteridad y recién cuando me vinieron a revisar (y me levantaron el algodón) pude ver lo ENORME de la aguja.
La donación en sí fue rápida y sin inconvenientes. Lo que más jodió fue cuando me pincharon el dedo para el recuento de glóbulos rojos. Una vez que doné me fui a reclamar mi desayuno gratis y volví con mi café con leche y medialunas a lo de mi Má.
No sé si será porque soy petite, pero donar sangre me dejó más estúpida que de costumbre. Durante el día traté de tomar bastante líquido y comer normalmente, pero mucho no se me dio y eventualmente me dio hipovolemia.
Así las cosas y sin intención de estirarme (aun) más es que todo esto me dejó con terrible antojo de helado, que recientemente se me había acabado.
Hace un tiempo le había prometido al Dorima helado de limón (su favorito) y ayer se me dio por cumplir.
Como toda receta brasileña, esta receta (robada de una sitio que ya no existe más) es bien dulce, así que están advertidos.
Helado de Mousse de Limón
- 3 limones
- 175 g de azúcar
- 500 ml de crema
- 2 claras de huevo
Azúcar y limón |
Batir las claras en nieve y la crema (en ese orden, preferentemente) y agregar a la mezcla de limón con azúcar. Unir con espátula y movimientos envolventes. Si se tiene máquina de helado no es necesario que esto último se haga con demasiado rigor ya que la máquina termina de mezclar todo.