Cuando empezó a salir el suplemento de repostería del diario La Nación, mi mamá me preguntó si quería que me lo guardara. Nunca me dieron buena espina esos suplementos pseudo-regalados de los diarios, pero siendo que era un regalo, acepté.
Después de más de 40 entregas hay que admitir que algo de razón tenía yo:
- Como libro tiene varios pifies. Ya van demasiadas recetas que leo (y no las leo todas) que tienen errores bastante feos. Un párrafo repetido en una revistonta no es ningún drama, pero cuando son instrucciones te puede arruinar la receta.
- El sistema de «esta tarta lleva X masa, ver ficha X masa» es MUY hinchapelotas. Todavía cruzo los dedos por que estos fascículos traigan un índice al final, porque así como vienen son complicados de usar.
- El sistema de fascículos es una ca-ga-da. El diariero te deja de entregar uno y ya querés mandar todo al carajo
- Las recetas son demasiado exactas. Seguro, son del IAG, Ariel Palacios y la mar en coche… Por suerte tengo una balanza de cocina bastante decente, porque sino calcular 215 gramos de azúcar, 3 de sal fina y 5 de bicarbonato realmente iba a ser un bodrio.
Lógicamente también tiene sus pros
- Las recetas suelen salir bastante bien.
- La variedad es muy interesante.
- Las pocas que he hecho son MUY ricas.
Hoy, después de mucho tiempo de renegar (con el medio kilito que me falta bajar y con lo mucho que tuve que hacer estas fiestas) se me dio por preparar algo. No tenía muy en claro qué, hasta que recordé un paquete de avena que me dio ayer mi Má y algo quise hacer con eso.
Como era de esperarse la receta que decidí usar es la de «cookies de avena» de este libro de repostería, pero como le hice algunos cambios y otras medidas no estaban especificadas, me pareció bien anotar mi versión y compartirla.
Galletitas de avena, coco y canela
- 270g de avena arrollada
- 190g de harina 0000
- 60g de coco rallado
- 5g de bicarbonato de sodio
- 5g de polvo de hornear
- 1 cucharada de canela molida
- 3g de sal fina
- 220g de manteca
- 215g de azúcar
- 1 cucharada de esencia de vainilla
Mezclar la avena, la harina, el coco, el bicarbonato, el polvo de hornear, la canela y la sal en un bol.
En otro bol, batir la manteca y el azúcar hasta obtener una crema pálida.
Agregar los huevos y la esencia de vainilla hasta integrar.
Incorporar la mezcla de avena y mezclar hasta combinar bien. Precalentar el horno a temperatura media (170°).
Mientras el horno precalienta, con una cuchara de helado o similar (yo usé la medidora que corresponde a la sopera) hacer bolitas y apoyarlas sobre una placa forrada con papel manteca. Aplastarlas ligeramente con una cuchara mojada.
Mandar al horno por 10-15 minutos y hasta que estén apenitas doradas.
El veredicto
¡Santa cachucha, qué ricas galletitas! Jamás había comido galletitas de avena (y mucha fe no les tenía) pero la verdad me sorprendieron tanto que me bajé como 5 al hilo.
Con la textura y el sabor como un enorme pro, tengo que decir que estas maravillas de galletas tienen un enorme contra: se exceden en gordas. Usando la cuchara medidora me salieron 47 galletas de un tamaño bastante bueno (más grande creo que se romperían) y con esa medida cada unidad tiene 99 calorías y 5g de grasa (3 de ellos, saturada).
Si buscás algo facilón y rico dale para adelante con esta receta. Yo por suerte encontré que una buena forma de no mandármelas todas de un saque es hacer lindos paquetitos para regalarlas a los seres queridos. ¡Que engorden ellos!
